Ya te ocultas, como el sol en un atardecer
De llamaradas naranjas
y demoradas
Tan encendido
estuviste, tanto calor me diste
Y hoy estas por
morir; durmiéndote en el ocaso
Y si acaso calentaste
mi corazón, por un momento
Ya ni me acuerdo, te voy olvidando andando
Esperando la noche, y la luna que nunca
Me abandona, con su
frio brillo resplandece
Mis dudas dejando al
descubierto el delirio
Desierto de un sueño
que creía necesidad
De un oasis, sed espejismo, ilusionismo
Una necesidad y nada
de realismo
No hay comentarios:
Publicar un comentario